Sunday, July 23, 2006

36.- ceremonia.


asi fue que Argia bajó para ver a sus invitados, se veía radiante, en su cara mostraba una belleza oculta, Arqueos al verla comprendió todo ya que aquella belleza ya la conocía Selide simplemente se limitó a contemplarla.
Asi se dispuseron a coversar despues de saludarse, Argia entonces le hizo una señal a su padre por que quería hablar con selide a solas, por lo cual se alejaron, pero sin encerrarse en ninguna habitación, por que habia que guardar el decoro.
- que laegría verte Selide, hace tanto que no sabía nda de tí, menos mal que te llegó la carta, sinceramente quería que tu estubieras en esta ceremonia conmigo.
Selide estaba estupefacto, y tampoco sabía como reaccionar ante el abrazo de ella.
- bueno, si, yo quería venir.- le respondió selide un poco indesiso.
- veo que te ha ido bien, hay alguna jovencita que no hallas podido traer o algo por el estilo.- le pregunto con cierta picardía.
- No, la verdad es que estudio en la abadía de Famekno, y ahí no van mujeres y...
- A claro, lo siento lo había olvidado.- dijo Argia con una cierta expresion que mostraba que lo sentía por preguntar eso.
- Y bueno, ¿Hidrien como esta?.- le preguntó selide para cambiar el tema, mostrando una falsa sonrisa.
- Bueno el, nose, no lo e visto en meses, dicen que ya llegó a Ciudad Central, para el matrimonio, le fue muy bien en los examenes de rigor, y estaba ya en la escuela de navegadores aereos en “Belos”..
- Espera, esperas, espera.- dijo sorprendido selide al no poder creer lo que estaba escuchando.- ¿quieres decir que no te vas a casar con hidrien?.
- A, disculpa lo siento, había dado por hecho que sabias, lo siento, no mira con Hidrien terminamos un poco despues que te fuiste por que su postulación a dicha escuela y nuestro estado de compromiso restringido, no eran compatibles.
Selide no podía dar credito a lo que escuchaba, y una idea se lñe pasó por la mente.
- si ubieras estado un poco mas en el anonimato, tu estarías ahora casandote con ella.-
y con aquello un fuerte dolor punzó en su corazón, y en su espalda naturalmente.
- ¿te duele algo?- preguntó ella al ver que su expresion camdio y sus manos rapidamentes se habia dirigido a su espalda.
- No, no lo mio no im`porta, ahora dime, ¿con quien te casas?.
- Bueno el se llama Netrion, lo conocí en la fista que preparó mi padre de cumpleaños, una semana despues que terminé con Hidrien, es de una familia que se dedica a el transporte tiene varios carros, y disculpame por no haberter hecho llegar la carta de invitación, la verdad es que no sabiamos donde estabas, y no sabíamos donde envirala, en tu casa estan preocupados, potr que cuando les preguntamos ellos no sabían nada de nada, pero tu madre te tiene mucha confianza.
Selide se sintió mal, ya que su medo a enfrentar su familia iba a tener que enfrentarlo pronto, pero por otro lado tenía pensado proseguir con sus estudios y dar noticias de vuelta como todo un erudito.

Luego volvieron al lugar donde conversaban arqueos y Pleistide y platicaron por largo rato, y comiron juntos, luego del cual, tras quedarse un rato, por la mala educación que representaba comer e irse. Es que se fueron.
Arqueos se dió por enterado del cambio de novio durante la conversación, pero su expresion no mostró sorpresa, ya que durante sus años, había aprendido a sorprenderse pocas veces. Y aquella tarde tras arreglarse fue que partieron a la iglesia “Akvo vundita”. Era una iglesia muy hermoza del sector norte, la entrada con grandes pilares que parecian los restos de una construccion Manthide, pero el interior y las paredes mostraban su arquitectura posterior. En los vitrales se podían ver alegorias a la fuente y al agua que emanaba, tambien a la sombra y la lucha de seres enviados por la sombra y la fuente para manejar el libre advedrío d los hombres.
Frente al altar una enorme fuente del que emanaba constantemente agua, y se fundía por una rejilla en el suelo, y lleno de invitados en las bancas.
En las inmediacines de la iglesia se podía observar todo tipo de gente, y como no reconocer, a los excompañeros.
- ¿como estas muchacho?- le dijo una señora sonriendo gratamente.
Selide tardó en darse cuenta de quien se trataba, era Necrogin, la madre de Bhor.
- pero si estas todo un hombre, de mundo, .- le dijo mirando sus ropas.- valla parece que estas estudiando en Famekno, como dicen, tu familia debe estra muy orgullosa.
- Hola, saludo tardiamente selide, bueno si estoy estudiando, ¿y como se encuentra Bhor?
- Bueno, ahí está ese chiquillo, no estudiando como tu, mas bien ahí haciendo negocios con no se quien, ha cambiado, si, ya no es el mismo, es mas frio para hablar, hasta siento una amrgura en su tono de voz, despues de todo soy su madre y las madres siempre notan cuando algo pasa, nose selide yo creo que anda en malos pasos, pero no te preocupes, ya anda que hay mas gente que quiere saludarte.
Y tal cual fue, selide era una de las novedades, todos lo miraban sorprendidos, por que claranmente habia existido el rumor que luego de ser practicamente expulsado de la casa de Argia se habia ido practicamente destrosado a su casa, solo algunos apoyaban de que Selide era mas valiente, cosa que fue confirmada cuando se supo que estudiaba en Famekno, la otra sorpresa era su simpatia actual con nitrien y fleur, de este ultimo lo esperaban, pero Nitrien, tenía una carater horrible como todos decían, ya que era evidente que se mostraba ufano con casi todos menos con su grupo mas cercano, realmente algo grande debía haber pasado.
La otra gran curiosidad de la tarde era Hidrien, que llegó al poco rato, con su unifotrme sin desmontar, sumente peinado, y aquel semblante militar poco a poco se había empesado a infiltrar en su cara.
Habló con todos con mucho respeto, y a selide le dió la mano con una gran sonrisa, se notaba que tambien estaba dolido por la fiesta pero al igual que Selide, debían mostrar que estaba triunfando en lo que había elegido.
Y por ultimo llegó el novio. Selide al verlo, le dolió nuevamente su espalda, “el si que era un hombre afortunado”, se decía. Y tras el todos los invitados fueron a tomar su asientos.
El sacerdote que oficiaba la ceremonia, era calvo y bajo por lo que se veía bastante gracioso en el altar, pero su semblante mostraba el respeto que su fisico no tenía.
Y luego llegó la novia, con su padre del brazo, la cara de felicidad del novio era obvia. Y lentamente con musica de fondo es que pasó adelante.
Durante cerca de dos horas duró la ceremonia, sobre respeto, fifelidad y amor.
Luego llegó el iintercambio de coronas el padrino entrega al novio la corona que ha de poner a su hija y una madrina del novio le entrego la corona a la novia para ponersela al novio, luego el sacerdote sacó agua de la fuente y con una copa de plata la roció sobre ellos diciendo:
“por que la fuente ha hecho todo doble, por que el hombre, necesita una mujer y la mujer necesita un hombre para que la raza hija de la fuente perdure y gobierne en la tierra, y que la sombra y el mal hombre ni la discordia ni enemistad desunan este compromispo, ante la fuente y ante el mundo son considerados una sola alma, esta casados”
entonces se dieron un beso y salieron acompañados por los demas.
Luego llegó el turno de la fiesta de matrimonio, ya que como es la costumbre, el padre de la novia es quien lo paga, y al ser su unica hija, esta fiesta fue magna.

Las mesas estaban repretas de los mas diversos manjares y licores, tambien diversos tipos de jugos, ya que existía una minoría que no degustaba el alcohol, entre ellos selide. Luego los musicos tocaron y comensaron a bailar, despues de bailar los nobvios lo hicieron los padrinos, hasta que todos se unieron para bailar.
Argia de ahí cogió a selide para que bailara, el cual estaba bastante inseguro, pero con Lithit habia aprendido muy bien.
- estubo muy bella la ceremonia.- le dijo selide tratando de sonreir con todos los musculus de su cara en un esfuerzo sobre humano, ya que lo unico que deseaba era que la fiesta acabara pronto, para poder irse a la residencial y llorar.
- Bueno gracias, me alegra que te halla gustrado la ceremonia, tenía miedo que no vinieras, que...
- No, no te preocupes.- le dijo selide al notar la cara que habia puesto argia.- estoy bien, el estudiar en famekno es grandioso, si las cosas siempre suceden por algo.
A lo que Argia solo sonrió y siguieron bailando.
- tengo una duda.- de pronto preguntó Selide.
- ¿dime?.
- Por que te casate tan pronto con el.
- Bueno eso es facil por que lo amo.
Esta respuesta no convenció a Selide del todo ya que era comun un estado de compromiso restringido de varios años antes de decidir casarse, y eran frecuente los casos, de que ni entonces se consumara esto.
- bueno, si, eres muy inteligente.- le respondió mientras le movía a sdelide un mecho de pelo que había caido frente a sus ojos.- lo que sucede selide es que va a llegar alguien.
- ¿quien?- pregunto ingenuamente selide.
- Estoy embarazada, mi hijo es de Netrion.ç
Selide se tropezo con sus propios pies y preirió irse a sentar, argia no comprendía que habia psado pero siguio para bailar con otro invitado, y los invitados no se percataron de la caida.
Selide se sentó en la mesa ytratando de reflexionar.
- Argia esta embarazada, eso significa... que el... y ella... juntos... ¡no! Eso es indecoroso amoral, es mas es un pecado.- Selide no lo comprendía, no habia escuchado jamas una situcación asi, solo molieb, pero por lo sufrido se lo perdonaba.- eso es obra de lqa sombra, si ella metio mano, aqui, no solo la sombra, sino la cienciua y la sociedad de Sargón, ellos Natos y Clores, ¿pero como?¿como lo permitió? Perder su dignidad asi, ¿donde queda la castidad?no entiendo, como no... es lo mas grave que e escuchado en mi vida.
Asi terminó la fiesta, cuando se volvían a la residencia, le dijo a Arqueos.
- ella va a tener un hijo-
- ya lo sabía, se veía muy hermoza, esa belleza solo se logra estando embarzada.- le respondió Arqueos.
En la residencia, Selide se encerró en su pieza, y lloraba, claro no era bien visto que los hombres lloraran, pero el lo hacía para desahogarse, toda la noche lo hizo, liberó todo lo acumulado aquella noche, y en aquel solloso se puso a orar.

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35.- la carta.


aquella extraña situación marcó hondamente en el alma de los presentes, selide pensaba en lo doloroso que eran las cosas, como aquel pobre sujeto habia tenido que suicidarse para alcansar la felicidad, auqneu fuera por un pequeño instante.
El Miceom Fongio tubo que quemar aquel trozo de queso, para que no sucediera nuevamente lo mismo.
Asi fue que el año nuevo paso casi inadvertido, selide rtecien se habia percatado que el año anterior no habia celebrado dicha fiesta, y sacando el calculo fue que descubrio habia sido durante su estadía en Remus, y en aquellas regiones el calendario usado era diferente se regía mas conb la fecha en que sucedía el dia mas largo..
Pero no era una cosa de que Selide y su grupo no quisiera celebrar dicha festividad, sino mas bien era una actitud generalizada, claro todos trataban de mostrar una falsa alegría, pero la tensión politica,. Se notaba en demasía, y claro mientras los tradicionalistas habían dejado de atacar, se habia hecho publica, un ataque de fanaticos religiosos de la fuente, que habia matado a un par de jovenes estudiantes de ciencia, lo cual no ayudó en nada en la ansiada paz.
Es mas un par de dias despues de año nuevo, uno de los sacerdotes mas viejos y conservadores murió repentinamente de un infarto al miocardio.
Publicamente se dió a entender en las pizarras del centro que habia sido muerte natural, pero la IFG(investigacion forense guardian) determinó que habia muerto por una extraña mezcla de quimicos, esto solo podría ser acción de algún alquimista los que eran pardte de la facción de la ciencia.
Asi el padre Viiyil tubo que detenerse en las investigaciones, por que al interior de la abadía se mostraba un claro resentimiento a todo lo que tubiera que ver con la ciencia, y hasta Molieb habia tenido algunos problemas en enfermería de pacientes que querían tratarse con metodos mas artesanales, los que no daban siempre buenos resultados, ya que aún persistía la costumbre de lanzar a las personas al agua para espantar los resfrios, o simplemente curara las cosas con aguas de hiervas.
Entre los estudiantes ta,bien circulabvan pequeños panfletos contra la ciencia, en la que se mofaban.
Pronto a Selide le llegó esto, olvidando los estudios de Viryil, o su amistad con berlem se convenció de que los que se encontraban en tal facción no eran mas que unos engreidos, se creían mayor a la fuente y que por ende caían el pecado de soberbia.
Arqueos se veía preocupado por Selide de cierta forma, ya que aunque el no entendía tales cosas de la cienciam, temía que Selide se dejara llevar muy rapidamente por el pensamiento circundante, pero tambien tenía sus preocupaciones, ya que se habia matriculado en nautica, como ramo tecnico, Fleur, por su parte era asistente de exoscirmo por lo que habia presenciado situaciones mas grande y terribles que las que habia vivido Selide, pero con las oraciones adecuadas y siguiendo el rito, poco debía temer, Nitrien se fue hacia la parte de asistente de escriba en juicios orales.
Y valla aquellos dias fueron de los mas poroductivos que cada uno tubo ya que fueron artes que aprendieron que nunca olvidarían.
Y asi de rapido pasó el semestre, y es que cuando una persona se encuentra ocupada, su ciclo circadiano cambia haciendo que esta perciba el triempo mas rapidamente que lo habitual, hasta que llegó una carta a Selide casi al termino del año.
-¿para mi?- se extrañó Selide.
Ya que era obvio que en Famekno no conocía a tanta gente, y a quienes conocia no necesitaban enviar cartas, de Ciudad central pocos sabían donde estaba, y en el valle de donde provenía sucedía una cosa similar, al abrir dicha cqarta se sorprendió mucho mas:

“Dsitinguido señor Selide Jol presente:

bajo la presente carta, le hagfo una invitación formal a la fiesta de matrimonio de la señorita Argia Fitz. a realisarze el 19 del mes en curso,se le recibirá con alojamiento y todo cuanto requiera, esperando disculpe la tardanza de esta carta por la dificultad en ubicarlo.
Esperando su respuesta y llegada se despide atentamente:

Pleistide Fitz (responsable de matrimonio)
Ciudad Central 1ª Vendemiere del año 5534”

Selide casi se desmayó al leer dicha carta, la mujer por quien erstubo en ciudad central, se iba a casar, naturalmente este prefirió no ir.

- ¿pero estas loco?.- exlamó Arqueos cuando supo sobre la carta.
- no,¿por que lo dices?.- le preguntó selide sorprendido por que pensó que lo apoyaría.
- Practicamente te echaron, Argia no vió lo valioso que eras, y bueno tal vez ni tu lo sabías, pero esta es el momentio para mostrarte glorioso, anda demuestrales donde estudias, ya no eres el niño ignorante de hace unos meses, y claro puede que aún te falten cosas por aprender, estoy seguro que sabes mas cosas de muchas de aquellas personas que se creen cultas y que se burlaban de tí en aquellos momentos, anda, demuestrales quien e4res y quie saliste airoso de una situación que sin mentirte ubiera desmoralisado a la mayoría de las personas si les ubiera tocado vivirlo, solo te pido que no vallas con las misma ropa que Plesitide te regaló eso mostraría que no has logrado mucho.
Selide no se veía muy convencido, pero Arqueos habló con todos sus amigos a los cuales les llegó las mismas invitaciones en un periodo de tiempo similar.
Hablaron con Molieb quien conociendo tambien un poco al Miceo lo convenció de que ayudara en tal obra.
Asui fue que el Miceom un dia sacó de su gavinete una botella de vino de 5284 la cual era una gran cosecha, ler dijo que valía mucho dinero y la cuidara como regalo de bodas. Selide lo miró sorprendido, pero este le respondió que por pequeña que fuera la botella, sería sensación.
Y selide que aunque no le gustaban los vinos le desgustaba el gusto a alcohol, si había aprendido a dstinguuier la calidad de un buen vino, por el olor y el color del vino.
Sus amigos tambien le prestaron dinero, y el Miceom ayudando nuevamente le regaló unos quesos, que al vender sacó el dinero necesario para comprarse unas nuevas ropas.
Luego cuando iba a comprar ropas, se encontró con Lanto en la plaza. El cual le dijo le ayudaría a elegir, asi que lo llevó a la tienda Dotoretu’s, según contaba el dueño era de otra pais pero ya habia alcansado renombre interregional por la finesa de tus trajes.
Asi fue que se compró una capa azul marino bien bzcuro, abotonado por el hombro, con botones de plata con el escudo de “Famekno”, unos pantalones de tela negros, traidos de las provincias nordicas, zapatos de cuero, y un cinturon con hebilla tambien de plata, donde podía encajarse su cladopla dentro de su respectiva funda. Unca chaqueta negra igual, con cuello, y botones, que mandó a marcar con el mismo simbolo de su otra chaqueta, osea que dijera “Selide”, dentro una camisa roja que no se lograba ver mas que por sobre el cuello, y un sombrero. Lanto le dijo que comprara un bastón, ya que estaban muy de moda, en paises mas refinados, pero Selide ya se sentía bastante incomodo ante tanta cosa, asi que denegó, ademas debía dejar algo de dinero para el viaje., y ni aún asi el dinero le ubiera alacansado.
Sus amigos tambien se arreglaron, pero no tanto como lo había hecho selide, y despues de recoger al dia siguiente las cosas mandadas hacer a mano, como los botones de Selide, fue que arreglaron sus maletas para regresar a Ciudad Central, ya que por muy cerca que estubiera, el camino en carro era bastante largo.
Y asi fue que los cuatro caballero, como se decían a cada momento partieron a Ciudad central.
Como el camino era largo, llegaron un duia y medio despues, les había tocado buen clima, y los criados de Pleistide estaban esperandolos en la estación de carros, les ofrecieron a cada uno una habitación en una residencial cercana a la iglesia donde se oficiaría el matrimonio. Solo Selide y arqueos se quedaron en ellas, ya que nitrien y Fleur no veían a sus familias hacía unos meses y querían compartir en sus hogares aunque fuera una breve estadía.
Asi aquella noche la pasaron en lujosas habitaciones, selide por su parte no lkograba conciliar el sueño, debido a que su estomago de rebolvía en solo pensar en Argia.
- que afortunado es Hidrien.- se repetía.
Aún no sabía como reaccionaría al verla, le daba miedo que todabioa le atrajera mucho y el solo pensar en verla en el altar le producía un escalofrío tremendo.
Asi que para poder dormir, mandó a pedir un surtido de hierbas, para prepararse una infusion. Con aquello, logró dormir bien hasta el otro dia.
Al despertar kle dolía un poco su espladak, en el lugar donde solían estar sus alas, pero ya etsba acoistumbrado a aquello, que cada vez que estaba ansioso o triste sucedía.
Asi fue que al diasiguiente fueron recojidos por un carro, para visitar la casa de plesitide, antes de ser la ceremonia.
Esto no era muy frecuente en las ceremonias de matrimonio, pero selide sabía que aquello era produco a la curiosidad de Pleistide de ver como estaba, ya que hubiera pasado lo que ubiera pasado, había vivido con el un semestre entero, que en comparación con lo vivido en la abadía no era mucho, si durante aquel tiempo había experimentado cosas fuertes que los unian casi como una union familiar.
Al llegar pleistide los esperaba en la puerta como buen anfitrion, se veía bien arreglado, sonbre todo bien peinado, y con una sonrisa de oreja a oreja, que selide apenas recordaba.
- ¡¿como está mi muchacho?!.- le dijo Pleistide al ver a Selide.
El abrazo que le dió dejó a selide sin poder responderle bien hasta que lo solto.
- este se habrá olvidado que el me echó- se decía selide, muy sorprendido.
- Valla, valla, a esta edad poco se crece pero si has tirado un pequeños estiron.- le dijo nuevamente pleistide mientras examinaba su ropa.- ubieras sabido lo dificil que fue para nosotros encontrarte, eso si que fue una expedición sobrenatural, ¿quien lo ubiera pensado?, Selide jol, el pequeño joven retraido e introvertido, dando los pasos para ser un hombre educado, fanekno es muy respetada en su abadía, realmente reconosco que fue una decision sumamente inteligente la tuya de entrar en ella.
Luego saludo a Arqueos pero se notaba claramente su favoritismo hacia Selide, asi los tres ingresaron a la casa.
Selide sorprendido miraba la puerta de entrada, aquella exytraña madera roja que había visto al entrar por primera vez, ya no le era tan desconocida, sabía que era alerce.
Luego de ntar conversaron un poco tomando el fermentado de algún cereal por parte de pleistide y jusgos naturales por sus invitados, al tiempo que mandó a buscar a Argia para que saludara a sus invitados.

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Thursday, July 06, 2006

34.- queso quimerico.


los dias habian pasado y el nuevo semestre comenzaba, los ramos eran practicamente los mismos, pero en formas mas avansadas, ahora no solo de la fuente aprendería sino de historia en general, las humanidades, serían el nuevo objetivo.
Pero a la vez tambien cursar un curso tecnico, y fue como Fongio tubo una aparición nuevamente en la vida de selide, ya que la especialidad de Miceom había elegido.
Asi que en esos dias, todos debíqan comprar los materiales para el nuevo semestre,
Selidepor otro lado salía cada vez menos a la plaza a darle comida a las aves, ahí se encontraba siempre con Lanto, con quien podía pasar horas hablando.
- ¿quien es el?.- le dijo cierto dia Nitrien que tambien paseando por la ciudad los divisó conversando.
- Bueno, el es un amigo, era amigo de la señora Ptara.
- Valla.- respondió Nitrien,- ¿no has tenido problemas con el?
- ¿problemas? ¿porque he de tenerlos?
- Bueno porque... ¿viste como se vestía? Y sus movimientos de manos, y cuando se deslisdaba el pelo, por favor eso no es de hombres.
- Oh ¿si, no es de hombres... de que es? ¿de Psyfagos?
- ¿psyfagos?, ¿que cosas dices?, no ves que se comporta como mujer, el no es una persona normal Selide ten cuidado, debe ser gay, yo los conosco.
- ¿los conoces?.-
Selide se sorprendió por la convicción con la que Nitrin hablaba, aquella forma segura de hablar, le hacía dudar de lo que el mismo pensaba de Lanto, ademas aún recordaba la sorpresa que le causó cuando lo vió por primera vez con sus ropas celestes.
Asi que por aquel comentario al dia siguinte prefirió quedarse en la abadí, por lo general aquellos dias no se quedaba mucha gente, Molieb y un grupo mas de personas se quedaban por que según querían vivir en paz a tener que amargarse la existencia por los comentarios que la gente hacia en el publo a su pasar.
Asi selide estubo ratos mirando el tronco del enorme sauce que se encontraba en el patio, y buscaba en las lineas formadas en su corteza alguna figura, algunas carias, o representaciones simples de la vida diaria.
Entos la puerta central de la abadía se cerró bruscamente, selide por lo curioso que era, partió corriendo a ver de que se trataba.
Era un señor que habia entrado vilentamente, sus ojos casi desorbitados daban la sensación que no le quedaba rastro de cordura alguna, pero a la vez, le hizo sentir identificado, en aquellos movimientos hasta un poco torpes se mostraba no solo enojo sino tristeza y soledad, y en el color obscyuro de sus parpados se podía ver claramente que habia estado llorando previamente. Con su mano derecha sujetaba una espada corta parecida a la cladopla, cercana al cuello de un gran sacerdote.
A este lo tenía de reen y dentro de las peticiones que gritó al entrar y agarrarlo por sorpresa era que cerraran la puerta.
- ¡alto! ¡Detenganse!.- gitó.- si ustedes, cualquiera que de un paso que no autorice, diga una plabra o simplemente piense mas de la cuenta, este sacerdote morirá en el acto.
En la sala se encontraban alrrededor de 28 personas algunas habian llegado corriendo al igual que Selide.
- ¿por que hay tanto odio en tu alma querido hermano?, no sabes que la fuente os ama, ella ama a todo quien la respete, si te muestras humilde y penitente ante ella ella te ayudará en todas tus aflicciones.- dijo con dificltad el sacerdote que se encontraba amenazado.
Se veía claramente como este estaba temblando del miedo.
- ¿fuente?, por favor, crees que ella me escuchará, ella no es mas que algo inventado por ustedes para controlar al ser humano, ¿cuando se ha presentafdo ella? Acaso estubo cuando murió mi esposa y mi pequeña hija en la enfermedad? Pensabamos que estabamos mejor despues de la guerra, pero no, acá no existe respeto, no atender a mi hijo adecuadamente simplemente por que somos inmigrantes en el hospital ¿es justo acaso?, y la fuente ¿donde esta?, hizo justicia, no, nos hace caer una y otra vez, como si se regocijara en mi dolor, claro si la fuente llegase a existir nosostros no seríamos mas que titeres, si marionetas para su entretención, se entretiene jugando con nosotros, con injustiocias, le dá a quien no merece simplemente para quienes tratan de hacer las cosas lo mejor posible toda su vida, vean que sus acciones son en vano.
- te equivocas. – respondió el sacerdote.- la fuente ama tambien a tus seres queridos, y se los ha llevado como un premio, para que no tengan qyue vivir en las injusticias que hay en este mundo, como dices, debe haber decidido que era hora de descansar, de lograr la felicidad eterna.
- ¡callate! Te juro que si vuelves a decir una palabra, te cortaré la garganta... si la gargana, lentamente como lo hacen los guerreros de oriente, ¿crees que es doloroso?, imaginta sentir como penetra un cuchillo en tu cuello, primero no mueres claro simplemente corto tu traqueo, luego ya no podras gritar, y te dejaría ahogandote con tu propia sangre, y no creo que la fuente de la que hablas te lleve antes de eso para ahorrar sufrimiento, esas cosas que dicen son patrañas, y tal como la fuente me quitó todo lo que tenía en este mundo, le quitaré ese sentimeinto que jamas eh vivido, por eso estoy aqui, supe que tiene a un Miceom, quiero hablar con él.
A estas palabras nadie constestó, asi que pronto el agresor exasperó y gritó:
- ¡alguien sabe del Miceom!, si no hablan mataré al viejo, asi que alguin responda.
- está en su oficina atras.- respondió un joven sacerdote recien egresado de seminarista.
- Entonces ¿que esperan? Traiganmelo lo quiero aquí... tu chico.- le gritó indicando a Selide.
- ¿Que haces ahí?, corre traelo, si te demoras mas de cinco minutos, lo mataré.
Asi fue que Selide partió corriendo, hacia la oficina de Fongio, el bien sabía que la oficina era nueva y se pasaba ordenando tardes enteras, mas estos ultimos dias , ya que como habia ofrecido el taller de Miceom, este habia alcansado gran interes entre varios estudiantes asi que tenía que preparar los materiales y procedimientos para el siguiente semestre.
Entonces llegó selide bruscamente a la puerta.
- Selide, que alegría verte, ¿pero que te...?
- Fongio, por favor.... ven .... acompañame.
Fongio no preguntó solo lo siguió ya que si habia llegado corriendo tan rapido debía ser alhgo urgente, asi fue que ambos llegaron al salon principal de la abadía.
- tic- tac, tic- tac, menos de cinco minutos tardaron, creo que al viejo aqui les debe la vida por un rato mas.- dijo ironicamente el agresor, al ver a Selide llegar con el Miceom.
- ¿Que sucede aquí?.- preguntó sorprendido Fongio al ver la inusual escena.
- Oh, valla, tu debes ser el Miceom, por muy Miceom que seas te debe faltar mucha inteligencia como para no darte cuenta de las cosas que pasan aquí, mi nombre es Bahitze, vengo del pais de Fantaisie, y vengo en busca de la felicidad, asi que me la darán.
- ¿felicidad?.- murmuraron todos un cuanto sorprendidos.
Dejenmé pasar gritó entonces mientras se acercó al Muceom.
- dime, donde la tienes, yo se que tu la tienes, entregamela... y tu quedaté ahí.- le gritó a Molieb que había aparecido sighilosamente por el pasillo al ver a tanta gente congregada.
- ¿quien eres tu? ¿Por que te aceercas tan callado?, ¿que quieres hacerme?.
- Bueno, yo nada.- respondió Molieb, en un tono mas que demostraba mas seguridad de la que realmente tenía.
- Espera... ese acento lo reconosco, tu no eres de aquí, ¿eres un inmigrante?
Molieb pensó un poco antes de contesar.
- si soy un inmigrante vengo de Urbo Norto.
- Valla, si por eso se me era familiar, tu te puedes quedar, por que sé que me comprenderas.
- No, no te comprendo, no puedo vcomprender a nadie que amenaze a otra persona.
- ¡¿Es que no entiendes?! Si tu vida aqui te debe haber rebajado, esto no lo quiero, una muerte la encuentri inecesaria como tu, pero me ciomprenderas, estoy seguro que me comprenderas
Por otro lado pronto habian empesado a golpear la puerta para poder entrar.
- salgamos de aquí.- gritó Bahitze.- esa pieza, quien tiene llave.
- Yo dijo un joven muy timidamente.
- Pasamela.- le grito nuevam,ente.
Luego de acercarse a la pieza que indicaba que era una oficina, obligó a quie todos entraran en el, menos el Fongio y Molieb, ademas de su rehen.
- no, alto no te llevaré a ningún lugar, si no voy con el.- le dijo el Fongio indicando a Selide.
- Bien, el chico que te fue a buscar... ya bueno puedes venir, pero no trates nada por que en el instante muere, y no me detendré con el, antes quiero la felicidad.
Y asi fue que despues de cerrar con llave, Bahitze los llevó por el corredor hacia el patio, caminando con toda seguridad y con una pequeña sonrisa en sus labios.
- lsto fuera todo juego, pasenme, quiero ser felíz.- les dijo pero de forma mas calmada.
- ¿felicidad? ¿que cosas dices?.- le dijo molieb tratando de comprender que era lo que planeaba.
- Pues tu Fongio que debes ser inteligente debes saber de que se trata.
- Si lo sé. – respondió Fongio.- se trata del queso, cierto
- Bien, bien nos estamos entendiendo - Respondio Bahitze complacido.- ahora entregalo.
- Dime primero ¿para que lo quieres?- preguntó Fongio sumamente serio.
- ¿que para que lo quiero, tu perfectamente sabes para que quiero ese queso, para comerlo.
Entonces selide recordó de que se trataba, era el queso quimerico.
- no, no te lo entregaré.
- ¿que?, ¿estas dudando en pasarlo?.
- Pues si, ese queso está resguardado, y no permitiré queb lo pruebes, ademas está en mi cabaña a 97 kilometros de aquí..
- ¡mentira!.- respondió Bahitze mas alterado.- sé perfectamente que no puedes arriesgarte a dejarlo, y tienes que salir con el, no me engañaras, veras, eh investigado mucho sobre los Miceom, y cuando salió el medicamento de aquí supe que aún quedaban, sé que lo tienes.- entonces presionó el filo de la espada corta un poco mas sobre la garganta del sacerdote, por la cual calló un par de gotas de sangre.- traemelo.
- No, te dije que no.- respondió el Miceom,
El ambiente se encontraba muy tenso por la situación.
- Mira “Honguero”...- dijo Behitze respirando profundamente para no descontrolarse y con ello perder el control de la situación.
Honguero por otro lado era una forma despectiva en que antiguamente se le trataba a los Miceom
- aqui sabes perfectamente que alguin morirá, asi que piensalo, me das el queso y consigo la felicidad, o prefieres que este viejo sacerdote muera, todo es tu responsabilidad.
- ¿que matarte? - Dijo sorprendido Molieb – ya que no había escuchado nunca de tal queso.- ¿para que quieres morir?, menos entenderé el suicidio esa es la peor de las salidas.
- No me jusguez.-. respondió Bheitze,- no lo entiendes, claro que el suicidio es la salida de los cobasrdes, pero te demostraré que esto no se trata de ello, se trata de cumplir tus metas, de torcerle el brazo a los designios de la Fuente. Y Miceom ¿que opinas?.
- Esta bien, - accedió Fngio.
Asi fue que los llevó hasta su oficina, solo el entró para salir con un baúl, luego de su cuello sacó una llave de bronce muy antigua, y la abrió, luego entre varios paños, se ensocntraba nuevamente una caja y dentro de esta, el queso.
El queso no se veía tan particular, entree los agujeros del queso se podían ver algunos micelios del hongo, el olor no dejaba de ser fuerte, pero abría en todos una hambre que era casi incontrolable.
El Miceom luego de abrir el queso lo dejó sobre una mesa, donde Behitze se acercó y sin soltar a su rehen, les pidió a todos que se alejaran veinte metros.
Y cuando se aseguró que estaban lejos, tiró al anciano al suelo, por lo que Molieb intentó pararse pero luego se arrepintió cuando Behitzé puso u pie sobre la cabeza del sacerdote que estaba en el suelo sin atreverse a mover.
Entonces con su espada corta cortó con mucho cuidado un trozo de queso, cortandole las orillas, y la puso en su boca.
Nunca selide, y Molieb habian visto una cara igual, era la ansiada felicidad de la que hablaba que se veía reflejada en sus ojos, Molieb lo comprendió, quisas solo una vez podría haberse sentido parecido a como podia ver reflejado en tal rostro, en su antigua vida, en su casa, con su prometida.
Pero en cuanto a Selide aquella cara era nueva, sabía que distaba de toda expresion sentida por si misma, pensaba en que los mas cercano a ello habia sido los abrasos recividos por Argia, pero eso era algo tan vago y despreciable al compararse con aquel sentimiento que presenciaba.
Entonces como tan subitamente habia adquirido esa expreción Behitze, fue que calló para luego morir, con una sonrisa que hacía resaltar su ropstros, jamas un cadaver habia sido tan bello.
- eso era lo que quería ebitar, ahora que lo eh visto no lo podré olvidar, pensaba guardarlo pero este queso tendré que destruirlo para que yo mismo no caiga en su tentación.
Pero ya era atrde para los jovenes selide y Molieb, uno sentía profunda melancolia.
Y el otro algo que no quería admitir, sentía envidia, envidia de aquella mirada, de aquella sonrisa, de aquel rostro, quisas tenía raz´ñon, morir así valía la pena ya que por lo menos conocería la felicidad, cosa que selide no estaba seguro de si algun dia alcansaría plenamente.

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