71.- alas contra ¿alas?.



Selide no lo pasó muy bien, uno por que pasó los primeros dos dias de esa seudolibertad con diarrea y dos por que estaba en clara desventaja, durante todo ese periodo cada vez que entrenaban, se notaba una clara diferencia de habilidades de ambos luchadores, Selide peredería si no hacia algo, , pero no podía dejarse estar ya que tal como habia luchado en aquel momento en que perdía la conciencia por culpa de la criatura que habian puesto en su interior, Selide no estaba dispuesto a ejarse vencer, su vida valía muchisimo y debia lograr algunas cosas antes de poderse ir en paz.
Asi qyue en su pieza entrenó, enttrenó solo por que no tenía con quien luchar,a tiempo que tambien estudiaba, estudiaba mucho sobre luchas, tecnicas y demases, ya que cualqueir estrategia le sería util en aquel momento de desventaja, pero a su vez sus planbes iban mas lejos Selide sabia que no solo se debia a el, sino a sus amigos, asi que comenzó una frentecica recoleccion de los documentos mas diversos a espaladas de sargón, formulas de pagos, ttraspasdois de dinero, cualquier cosa, nombres en planillas, durante aquella semana selide se asombró de la inmensa cantidad de actos en la que la Sociedad se encontraba envuelta. Dentro de la Sociedad de sargón solo tenia a una persona de confianza y este era Otdio.
Cierto dia Selide se encontró con el en los pasillos y hablaron.
- por favor quiero que tu lñleves estos papeles, se que te costará poero a mi no me dejara llevarlos, quiero que los lleves a la direecion que te voy a dar, ya que es uno de los mas altos capitanes que aunque no conozco es de los pocos en quien se puede tener tal confianza.
Otdio revisó un poco lños papeles, estaba dentro hasta una lista de guardiuanes comprados por la Sociedad de sargón.
- pero disculpe señor Selide, si yo hago esta pues la verdad sería el fin de...
- lo sé- dijo selide- pero en ti confío por favor te lo pido, despues puedes trabajar de otra forma, hablaré con la princesa de Borga para que te trasladen o algo se que podrás, ademas eres de los pocos que sabe que la princesa estaba en Famekno.
Otdio acepto ya que estaba en la Sociedad de sargón por compromiso mas que por que la vida de cleptom le agradara mucho, y siendo como Selide decía, ya no tendrúia mas deudad que saldar.
Cuando selide le contó en que momento debia llevar los papeles, Otdio supo que Selide peleareía con sargón.
- ¿puedes ganarle? – preguntó curioso Otdio.
- No lo se, no lo creo, pero lo intentaré.- dijo Selide un poco preocupado pero con la cara que ponía cuando no querian que descubrieran su verdadero estado animico.
- Esta dicho entonces yo te entrenaré- dijo decidio Otdio.
- Solo quedban tres noches para completyar la semana, y comenzó el entrenamiento de Otdio.
Al principio Selide no sabuia en que podría ayudarlo, ya que sabia que hasta el era capaz de ganarle a Otdio, pero Otdio le quería enseñar a pelear en la oscuridad, Potdio cuando peleaba de dia lo hacia utilizando un poco de vista perfiferica, pero en general por sus otros sentidos ya que los ojos no le funcionaban bien con mucha luz.
Por lo que entrenaban de noche, selide dormía menos pero durante ese periodo lo que menos le ninteresó a Selide fue dormir.
Conoció losd movimientos basicos para responder a un ataque dependiendo la intyensidad del sonido que escuchara mientras luichar.
Peleando en la oscuridad de la noche Otdio tenia ventaja sobre Selide y siempre ganaba.
- no te fijes solo en los sonidos- dijo Otdio.- fijate en como resives los ataques, sientelos kinestesicamente, recuerda que deben tener un patrón.
Selide recordó una idea casoslogica que decía que todo en la naturaleza debia tene rpatrones y que bajo estos se edificaba la casoslogia que debia encontrar dicho patrón matematicamente, sabia que el ser humano es un ser natural, porende tambien patrones debian trabajar en cuanto a sus acciones.
Y una idea cruzó por su cabeza, “los ataques mas fuertes los recibes por la Izquierda”.
Asi que Selide rapidamente cambió de posicion dejando su lado drecho adelante y un paso atras el izquuierdo de tal forma que aunque pelear ladeado fuera un poco extraño para el en la luicha con armas, podría mantenert su lado que recibía los ataques mas fuertes y a la ves defenderse con el derecho ya que Selide era diestro no surdo.
Asi fue que la ultima noche de aquella semana durante la ultima pelea Selide logró ganrle a Otdio perfeccionando ataques con ambas manos utilizando su cuerpo para darse cuenta de donde provenían los ataques mas fuertes.
Asi fue que la mañana del dia esperado llegó, Selide recibió un desayuno muy abundante y rico, se daba cuenta de que Sargón estaba seguro que aquel dia sería su ultimo dia de vida y por ello le daba tales regalos, asi que comió callado y con mucho miedo ya que tambien sabia que aquel pensamiento de argón tenía fundamento.
El permiso legal para hacer un duelo preparado en la plaza se hizo, y fue tal la noticia que pronto en casi todo Famekno se sabía que habría nuevamente un duelo en la plaza.
Los grandes politicos de la cidad comenzaron a discutir de inmediato sobre la vigencia de una ley tan antigua, pero el resto de las personas se veía muy anciosa por asistir.
Cuando en la abadía supo rapidamente Helis, Arqueos,Molieb, Nitrien y Fleur. Pensaron en la posibilidad de que fuera Selide uno de los que estaría en el duelo. Helis tambien recordaba el duelo que habia tenido cion Bhor en Jeif.
- si debe ser el.- afirmó.
Asi que decidieron ir, aunque claro Nitrien y Arqueos no podrían ir por la orden judicial de apresarlos si los encontraban.
Asi que partieron.
El mediodia era una hora costumbre para los duelos.
La hora habia llegado y la plaza se llkenó de gente curiosa amigos de Selide y periodistas. Hacía cerca de 30 años que no se efectuaba un duelo legal, algunos periodistas recordaron las noticioas de hacia un par de años sobre un duelo en la ciudad vecina de Ciudad Central, y algunos relataban a los curiosos aquel duelo entre un miembro de la sociedad de sargón, Natos, y un chico introvertido llamado Selñide.
Entonces llegó un grupo muy compato de cleptoms, que claro no parec´ñian tal, solo parecían guardaespaldas.
De entre el circulo que formaron salió una persona muy elegantemente bestida pero con un extraño abrigo que parecía cubrirle una joroba.
- ¿sabes quien es?- se preguntaban unos a otros.
La verdad nadie le conocía.
Y al sacarse abrigo extraño aparecieron un parvde enormes y hermozas alas negras.
- ¿será Selide?- dijo asustado Fleur
que recordó cuando selide hablaba de recuperar sus alas, aquella noche con Carbionette, nunca habia entendido de que se trataba aquello pensaba que era una metafora pero aquello era real.
- no ese no es Selide- afirmo Molieb.
- pero es imposible los huimanos no tienen alas- dijo asustado nuevamente Fleur.
- Tendrás que acostumbrarte que no todos los humanos son tan normales como piensas, si existen personas en blanco y negro y personas que pueden vivir conb devcadas sin evejecer un dia, por que nbo podría haber personas con alas- dijo muy serio Molieb- refiriendose a el y a Arqueos que no se encontraba.
Auqneu Fleur se habia quedado mas tranquilo, no fue asi con todos ya que la mayoría no lograba comprender aquella visión.
Y la segunda persona en salir del grupo de cleptoms, fue un chiquillo muy ojeroso, delgado y con una mirada un tanto perdida.
- ese es Selide- gritaron a coro los amigos.
Los periodistas cercanso que escucharon anotaron esto de inmediato, el mismo nombre en dos duelos de ciudades vecinas, esto daba para una gran noticia ¿quien sería qwuel introvertido muchacho enbuelto en dos cirscunstancias similares.
Cuando Selide escuchó su nombre resonar entre las diversas personas supo que gente conocida lo miraba pero estaba muy nbervioso y no se atrevía a levantar la mirada hacia la gente sin que tiritara completamente su cuello.
Entonces apareció un guardian estudioso de leyes antiguas como la ley del duelo para dirigir aquella lucha.
- estamos aqui para presenciar el duelo entre Selide Jol Regö, y Garnos Anonime.
El nombre era muy extraño, Selide sabia que era inventado para ebitar que le descubrieran .
- ambos pelearan con cladoplas...- prosiguió el guardian,.- como han de recordar, todo hecho dentro del duelo que afecte a los participantes queda enmarcado dentro de la ley de duelo y no tendrá sanción, si alguin interviene por otro lado será encarcelado completamente cometiendo una falta grave contra el honor de caballeros. Ahora preparense.
Selide sacó de su cvinto su cladopla, la fiel acompañante, que tenía durante muchisimo tiempo, mientras Sargón sacaba el arma ya conocida, lo que parecía una cladopla negra pero sin inscripciones algunas.
- tranquila, tranquila- decía Selide a su cladopla- no nos dejaremos venecer por una imitación.
Luego Selide y Sargón se dieron la mano, se pusieron en pose de pelea, y partieron.
Selide estaba espectante, tenia miedo pero prefería que Sargón partiera atacando ya que si era asi, podría ver bajo que estilo atacaraía y le daría tiempo de optar por un estilo mas apropiado.
Sargón al ver que Selide no partía, dio un par de pasos rapidamente para atacar a Selide no con demasiada fuerza sino con la intención de moverlo a pelear. Selide bloquó el golpe y asi otro y otro, entonces Sargón bajó un poco la guardia y Selide hizo lo mismo, la verdad ambos hacian movimientos no muy eficases para calentar un poco, y `por caballerosidad cada uno de los dos no se aprovechaba de esta cirscunsdtancias del controicante, solo tal vez Selide que pronto aprendía sobre el estilo de pelea. Como hgabia aprendido con Otdio.
El publico estaba emocionado al ver tal pelea, ya que auqnue poor el momento ambos solo estaban calentando, los movimientos de ambos eran experimentados de cierta forma, cosa para la cual el publico de Famekno no estaba acostumbrada.

“ahora comprendemos como alguin tan introvertido se la pasa en peleas, ya que como se pude observar, los movimientos del chico llamado Selide se ven muy experimentados, y nos hace pensar de quisas en cuantas peleas ya ha estado involucrado”
escribía sin cesar uino de los reporteros que veía la pelea.

La cladopla de sargón pasó rosando el cabello de Selide a tiempo que se agachaba. Y esta en tal posición abanicando lateralmente atacó a las piernas al tiempo que Sargón saltaba hacia atras. Los movimientos de ambos ya empesabqan pronto a dejar de ser un juego y se inscursionaban con sumo peligro en la idea de herir al otro, pronto los intentos etoques eran mas frecuentes, y los saltos girós y pasos rapidos para esquivar algun ataque se volían mas familiares.
- ¿desde cuando el vivir o le morir ha estado tan cerca?, un movimiento en falso y la vida puede acabar, no quiero que sea asi- se decía en pensamientos Selide.
- siempre ha sido asi, solo que muchos lo olvidan, siempre ha sido asi, es la unica certeza, la unica verdad que todo ser humanio debe comprender desde el momento en que nace y aún antes, la unica certeza en esta vida es que moriremos.- escuchío en una voz en su cabeza.
Selide no se asustó, ya no era extraña, se escuchaba como el mismo, y era popr que asi era, era lo mas remoto de su ser, el Daymon de la persona, aquella voz que siempre dice lo que pensamos.
Para entonces el choque de las espadas le hizo volver en si, las espadas producían chispas, con aquel chirrido de metal, al tiempo que en un extraño m movimiento, las armas rotaban entorno al punto de choque, provcocando que ambos filkos se estrellaran contra el suelo.
Mas chispas de la hoja chocando con las piedras los hizo retroceder de un salto.
Habia un leve olor que recordaba a Selide cuando era pequeño y hacia chocar dos cuarzos para que provocaran chispas.
Ambos levantaron las ojos y en unos segundos se aseguraron que las hojas no se ubiesen mellado.
La gente dio un paso mas atras dandole mas espacio a la pelea, Selide intentó atacarlo de la forma en que a el mismo mas le ubiera costado defenderse y es por medio de ataques punzantes.
Avanzaba on un pie delante, semi de costado.avanazando a lo que Sagón movia su seudocladopla de un lado a otro en forma horizontal a si mismo, llevando la hoja de Selide siempre hacia afueraprovocando mas de una vez que Selide casi perdiera el punto de apoyo y callera.
Entonces sargón para no seguir retrocediendo, en una arriesgada maniobra golpeó la hoja de Selide hacia afuera tomando la seudocladopla con la mano izquierda, ya que mientras selide estaba sin punto de apoyo, Sargón con su mano derecha golpeó a Selide en la mejilla.