24.- Famekno.


al dia siguiente la lluvia habia menguado un poco, pero aún asi seguía sin detenerse.
- Chicos despierten- grito amablemente Vantaz.
Y comenzó el movimiwento en la casa, Helis fue a ver a Selide a su pieza, el cual estaba despierto, y quisieron esperar ya que en la casa habia un solo baño.
- y ¿pensaste en la noche sobre lo que dijo Arqueos?.- le preguntó Helis.
- Bueno creo que fue mas lo que pense a lo que dormí.- respondió.
- Y que opinas, ¿que vas ha hacer?
- Me complicó bastante la propuesta ya que tenia pensado todo lo que haría, pero creo que la aceptaré, saldré a conocer aunque sea un par de pueblos solamente, pero sería bueno que conociera el mundo antes de volver, ademas debo aprovechar ahora puedo.
- Esta bien, entiendo amigo.
Y asi transcurrió el dia, y cuando dió la noticia de que se iría, en la casa se lamentaron por el poco tiempo, pero Vantaz le preparó una comida y unos dulces para el viaje.
Y despues de la hora de almuezo, llegó Arqueos, con uno bolso mas grande que el de Selide y muy mojado.
Como los viajes a Famekno eran escasos debían apurarse al tomar el coche, asi que se despidieron de la casa de Helis.
- no te preocupes amigo, estoy seguro que nos volveremos a ver, pasaré esta vez el curso, ya veras.
- Esta bien, y te creo nos veremos pronto.
Y se despidieron en un abrazo, para luego partrir con Arqueos.

Tomaron un carro que los llevara a una estacion de carros interciudad, al llegar Selide pagó su pasaje, gracias a las monedas de oro que le habian dado cuando se habia ido de su valle, ya que en Ciudad Central no habia necesitado gastarlas.
Tomaron un carro que llevaba a Famekno, guardaron su equipaje y solo debieron esperar un poco ya que un par de pasajers llegaron tarde, y partieron, Selide se maravillaba por las gotas de agua que chocaban en las ventanas y mirandolas como se movian hacia arriba como si fuera algo antinatural, hasta que se hiso tarde llegaron a un pequeño poblado en la forntera de Ciudad Central, donde pidieron un par de papeles, y pasaron la noche dentro del carro, mientras este estubo detenido, ya que la noche y la lluvia no eran buenas compañeras, sobre todo por el barro.
El dia siguiente se perdió tambien en el viaje, la lluvia habia disminuído, pero el barro hacía del viaje algo peligroso por lo que iban sumamente lento, y se detubieron un par de veces para que el conductor descansara y para que fueran al baño los pasajeros, en la noche fue lo mismo llegaron a Famekno al siguiente dia.
La mañana era fria y humeda, y el cielo ya se veía despejado, famekno era una ciudad mas pequeña que Ciudad Central, pero esto se debía a que no era una ciudad industrial ni nada por el estilo, sino que era reconocida por los importantes centros del saber que tenía, ademas que se encontraba uno de las abadias de la fuente mas importante que habia, por esto mismo la ciudad estaba muy involucrada en la discusion que habia de religion contra la ciencia, en aquellos lugares tambien existian ruinas de la civilizacion Manthide, ya que esta cubría un enorme territorio, el río “Eufertis” cruzaba por el norte de oeste a este siendo navegable y una ruta rapida hacia e oceano, dicho río era el responsable de la forma de cierta parte del valle, ya que al igual de otros lugares, tambien era un valle.
Esta vez la ciudad no tenia una configuracion radial, como la rueda de una bicicleta sino era mas caotica ya que habia sido formada al rededor de los centros de saber, por las mismas personas que viajaban desde lejos para instruirse en diversas areas.
Al llegar a la estacion de coches, Arqueos y Selide tubieron la primera problematica, ¿que hacer?.
Los bolsos los dejaron en una custodia en la estacion y cada uno se fue por su lado a conocer la ciudad, ambos regresarían a la estacion a mediodia.
Selide empezó a caminar por las calles caoticas de la ciudad, habia menos cantidad de carros que en ciudad Central, ya que la gente caminaba mas o utilisaba maquinas de 3 ruedas que utilizaban la misma fuerza mecanica producida por la persona por medio de pedales.
En las esquinas habia distintas personas algunos hacian pequeñas representaciones drmaticas, y los espectadores le daban algunas monedas, mientras que en otras esquinas habia gente hablandole al publico:
- por eso hijos de la fuente, como hijos que son, no se alejen no dejen que la sombra, los tenté, ya que se ha mezclado con los hijos de la fuente para separarlos de la verdad, por medio de sus artilugios llenos de logica, con el nombre de ciencia, es que acaso ¿somos merecedores de manejar la naturaleza a nuestro antojo?, y la respuestas es no, no queridos hermanos, nosotros somos hijos de la fuente para contemplarlo, y contemplar su obra, solo eso es necesario, las demas cosas son solo engaños que quieren perdernos aprovechando el vacío que las personas sienten, pero ese afan de entender las cosas no los llevará a ningún lado, o ¿les traerá la felicidad?, bueno hermanos yo puedo decirles que...
Selide siguió su camino pensando.
- ¿será verdad?, que para ser felíz no hay que hacerse preguntas y que estas alejan de la fuente, la ciencia entonces ¿son partes de la sombra?, por que las cosas son tan complejas, me gustaría saber, ay de mi soy tan debil en esos aspectos religiosos, por eso la fuente no me escucha.
Selide siguió en su camino y se puso a descansar cuando encontró la plaza, donde estubo observando a las diversas personas.
- ¿que sucede jovencito?.- le dijo sonriendo una extraña anciana que se senataba asu lado, usaba unas ropas arapientas y llevaba una bolsa de genero con distintas semillas.- no es que conosca todas las caras de quienes viven aquí, pero con mis años ya me es facil saber cuando alguien está en Famenko por primera vez.
- bueno, hola, me llamo Selide, y ¿tu como te llamas?.- le preguntó.
- No lo se, apenas lo recuerdo, hace tanto tiempo que no utilizo el nombre que me dieron mis padres, ahora solo me llaman la vieja de las aves, pero eso no es lo importante- le dijo mientras le miraba a los ojos.- lo importante es saber, ¿que te pasa?.
- ¿pasarme a mi?¿por que debería pasarme algo?.- respondió Selide nervioso, ya que le habia dado la sensacion como si le ubieran leído la mente.
- No deberias asustarte, es por tu mirada, tu mirada te delata, veras, si fueras una pobre vieja como yo, que ha pasado los ultimos años de su vida en la plaza, viendo cada dia a tantas ersonas, pronto aprendes a mirar en sus miradas, y se vuelve innecesario el tener que hablar.
- ¿mi mirada?, supongo que aprenderé a mirarla en los demas.
- Yo creo que lo mejor es que primero partas por ti jovencito, pero ¿que es lo que te aqueja?
- Bueno verá, es que... trato de hacer las cosas lo mejor posiblñe pero nunca resultan... ¿quien tiene la respuesta la ciencia o la religion?¿cual es buena y cual deno dejar?.
- No lo se, jovencito, yo solo veo a las aves, y son tan felices sin nuetras religion, ni ciencia.
- Entonces usted dice, que ninguna de las dos, ¿simplemente por ser?.
- Yo no estoy diciendo eso, estoy dciendo que las aves no necesitan ni religion ni ciencia, pero nosotros no somos pajaros, no tenemos alas...- la anciana lanzó un par de semillas y varios pajaros se acercaron a comer, pero prosiguió rapidamente al ver en la mirada de Selide un “pero – nosotros tenemos nuestras propias alas, pero cada persona se debe conocer asi mismo.
Selide miraba a las aves, pensando en lo dicho por la anciana, y en:
“¿si uno pierde sus alas, tiene una segunda oportunidad?, ¿o pierde toda posibilidad de ser felíz por las acciones de los demas?”, esta ultima no le gustaba.
Entonces se dió cuenta que era mas tarde de lo previsto y se acercaba mediodia. Por lo que se despidió amablemente de la ancian.
- nos vemos Selide.- le respondió sonriendo.- estoy segura que nos veremos pronto.
Entonces Selide se fue caminando hasta la estacion, donde el llegó tarde ya que Arqueos estaba esperandolo.
- Selide hay malas noticias.- le dedijo en cuanto llegó Arqueos en tono grave.
- ¿por que?, ¿que pasó?.
- No has visto las pizarras ¿cierto?.-
- No, bueno nose mucho de eso.- le respondió Selide confundido.
- Esta bien acompañamé...- luego fueron a retirara los bolsos y se fueron hacia el centro.
A unas calles de la plaza, se encontraba enm centro taqyigrafico, que era el lugar donde las noticias llegaban de forma rapida por medio de una maquina muy simple, utilisando un codigo de puntos y rayas. Al frente se encontraba una tienda muy grande de libros y fuera de la tienda habia muchas pizarras, escritas con tiza, de diversas notricias, que llegaban desde el frete, y en una pizarra grande con tiza roja decía:
“Mazmaro atacó Fantaisie,por supuestos abusos en la frontera, Urbo Norto ha sido evacudad por parte de la poblacion gracias a la ayuda de “Challeng” por lo que Lando tambien ha declarado la guerra a dicho pais, y tambien se ha comprometido a mandar fuerzas para ayudar a su aliado Mazmaro contra el hipocrita Fantaisie como llama el jefe de estado”
Selide nunca habia entendido mucho de politica internacional, pero trató de mostrar interes y una cara de preocupacion, luego vió la fecha y se dió cuenta que coíncidía con el dia mas largo.
- ves, siempre en el dia mas largo pasa algo importante, eso ha sido la regla en todos los “dias mas largos” que e vivido.
Selide solo afirmó, pero luego Arqueos le indicó otra pizarra, indicando que no todo terminaba ahí.
“ los gobiernos de Ciudad central, Famekno y diversas ciudades, reinos y demas se han comprometido a enviar ayuda Challeng, a dar libertad nuevamente a Urbo Norto y los demas paises del sector, todos los jovenes mayores de 18 años con o sin el curso de defensa personal aprovado y que no trabajen ni estudien tendran la asistencia obligatoria a la mesa de reclutamiento mas cercana”
- ¿sabes lo que significa eso?.- le dijo Arqueos a Selide adivinando en su exprecion que no había entendido mucho.- significa que nuestro viaje o tendra su proxima parada en la guerra, o buscamos alguna alternativa.
- ¿Y que podemos hacer?.- preguntó Selide aterrado.
- Por lo personal, la ciencia es algo muy nuevo que no conosco bien, pero una abadía es un buen lugar para estar, lo mejor será refugiarse ahí aprovechando las cirscunstancias en que nos encontramos.
- Esta bien.- respondió Selide.
Preguntaron y supieron que la avadía estaba hacia en noreste, asi que tomaron un carro para llegar.
Las murallas del convento eran muy altas, y de un color blanco, la entrada principal parecía un palacio, con un par de enormes alamos que custodiaban la entrada, y mas alejados de la puerta unos enormes arboles de mas de 30 metros de alto.
Tenian un techo cubierto con tejas de un color rojiso, y las ventanas con hermosos vitrales, para llegar habia que subir un par de escalones, y la puerta de un color rojiso se encontraba abierta.
Al entrar, era una sala amplia donde dejaron sus cosas y se sentaron a esperar.
Hasta que se escucho el eco proveniente de unos pasos que se acercaban, era de alguna zandalia con base de madera, quien los llevaba era al parecer un sacerdote, un poco calvo con unop que otro pelo negro que con las nuemerosas canas, le daban una tonalidad grisacea.
- si, ¿que desean?- preguntó con una voz sumamente amable.
- Si, disculpe es que nos gustaría matricularnos en las clases de esta abadía.
- Sigamené – dijo sonriendo. – es curioso como se ha incrementado ultimamente el deseo de estudiar entre los mas jovenes, gran coincidencia al declararse la guerra.- les lanzó una mirada fugaz- pero a nosotros nos agrada, ya que no es nuestro deber juzgar.
Asi los hiso entrar en una oficina mas pequeña, era al igual que casi todo el recinto, de un color blanco, había varios estantes con libros, y simbologia que hacia alucion a la fuente colgada por todos lados, a Selide le llamó la atencion un cuadro de una estrella de siete puntas hecha en piedra.
- bueno, jovenes, esta es la abadía de Famekno una de las mas importantes del sur del continente, es famosa por los centros teologicos y humanistas que contiene, tambien por tener maestros en medicina antigua, y otras ciencias, ya no tan comunes en los tiempos actuales, el curso esta preparado para jovenes pero se pueden matricular en un curso especial que se ha formado, pero claro sin importar todo el interes que halla, deben saber que la abadía debe ser financiada de alguna forma, podemos mantenerlos como huespedes un par de dia, pero una estancia prolongada y el uso del material de la badía cuesta dinero ¿tienen alguna forma de pago.
- de eso no se preocupé – respondió Arqueos, sacando de su bolsillo un par de monedas.
- Valla, valla, valla.- dijo el sacerdote examinando con sumo cuidado las monedas.- estas monedas son valiosisimas, son de una serie descontinuada.- levantó una mostrandole a selide .- un dibujo de una fuente del periodo Manthide, pero que hace a una alegoría mas moderna, aquellos tiempos en que la iglesia estaba mas relacionada con la vida de los habitantes de estas tierras, pero ya no se puede hacer... bueno con respecto a las matriculas, con esto bastará, si es suficiente para costear la matricula, pero usted jovencisto ¿como va a costear su matricula?.- dijo dirijiendose a Selide.
- Bueno yo.- respondió rapidamente tratando de buscar donde estaban sus monedas, sacó el bolsito, de el un par de monedas y la dejó en la mesa.
- Si esto tambien es suficiente, aunque no lo tome a mal, pero ya sabia que podría costear la matricula, solo fue una pregunta de matricula, ya que veo por su traje que es un caballero, no cualquiera anda con tales cosas, pero disculpe mi curiosidad, es que e visto que porta un arma bajo la capa, me la podría mostrar.
- Claro. - Respondió Selide, la desató la saco de la proteccion y la dejó ensima de la mesa tambien.
- Valla, una cladopla, hace mucho que no veía una.- dijo examinando el arma.- ¿es de la famosa familia Regô?
- No, mi madre si, yo me apellido Jol, Selide Jol.
- Valla, eso lo podriamos arreglar.- respondió mirando a selide a los ojos.- como se sabe, aunque muchos lo han olvidado, deben inscribirse las grandes asañas, y creo que sería pertinente que dejara de forma impresa el cambio de linaje del portador de la cladopla, claro eso es desdicion tuya...-
- Esta bien. – respondió Selide un poco avergonzado.
- A claro lo olvidaba es necesario que me pasen sus papeles para llenar la ficha que hacemos de todos los alumnos.
Ambos le pasaron sus papeles de aprovacion del curso de defensa personal, de aduana, y un certificado de identidad.
- disculpe seño... ¿Arqueos? Pero este papel dice que usted tiene mas de cien años lo que creo francamente imposible, puede que se halla equivocado, pero...
- no, lo siento, pero no es equivocacion, y se que suena extraño, pero aquí en su abadía debería serle mas cercano, sobre todo lo que tiene que ver con brujeria o magia...
- valla, asi que es eso.- respondió lentamente, como si tratara de acomodar ideas, un poco confuso pero sonriente a la vez.- si las obras de la sombra son innumerables, y supiera cuantos exorsismos se hacen aquí, valla, valla pero voy a tener que pedirle que mañana valla ha hacerse unos examenes para corroborar identidad, usted debe saber, protocolos del papeleo, ademas es de una fecha posterior al dibujo identificatorio, que se usa actualmente.
- Claro que no me molesta.- responidó Arqueos entre riendose, por la situacion.
- bueno supongo por los papeles de registro, que tambien necesitaran un lugar para quedarse, ya que señor Arqueos usted es de la mesa inscritora central, de ciudad Central, y usted señor Selide de la mesa inscriptora Grecial, de Ciudad Central. Bueno ahora voy a dejar los archivos, esperen mientras mando a algún mozuelo a buscarlos.
Y se fue por la puerta para dejarlos solos por un buen rato.
- ¿que era eso de dibujo identificatorio?.- preguntó selide ya que no se habia dado cuenta de la diferencia de ambos papeles.
- Es un dibujo que se tiene de la persona, es normalemente hecho con una tinta especial para no ser falseada, se dice que en paises mas ricos se hacen con camara cromatograficas, pero de eso nose mucho, ya que en el ultimo tiempo a habido muchos adelantos, quisas mas de los que una persona debería soportar.- respondió en tono que mostraban obvia tristeza.